3ª parte: ¡No matarás¡ El respeto a la vida

Curar: Curar las heridas, la enfermedad y el sufrimiento, y acompañar a los heridos, a cuantos sugren, malviven y malmueren. Ofrecer razones para luchar, sufrir, vivir y esperar. 
Entregar: Dar la vida, partirla, compartirla y repartirla cada día entre los demas. Es el signo del más grande amor, de la solidaridad sin límites: "nadie tiene mayor amor que el que da la vida por los que ama". La vida encuentra su centro, su sentido y su plenitud, cuando se entrega.
Educar en el valor de la vida: Suscitar el sentido y la alegría de vivir, el aprecio por los valores humanos, el respeto por la dignidad de toda vida. Construir juntos con todos los hombres de buena voluntad la verdadera cultura de la vida. Las nuevas generaciones tienen necesidad de encontra en padres yeducadores verdaderos "maestros de vida".